
Y esa realidad ha resultado bastante dura. Incluso el Porsche más rápido de la historia, con récords en pista, un nombre prestigioso y muy pocos kilómetros, pierde una cantidad enorme de dinero casi al salir del concesionario.
Cuando la estrategia no encaja con el mercado
Porsche es una marca que durante décadas ha ganado con emociones, ingeniería y un conocimiento preciso de su público. Pero la gran apuesta por los deportivos eléctricos mostró de repente que incluso las grandes compañías pueden equivocarse de forma dolorosa. Las inversiones en la gama eléctrica han sido tan costosas y con tan baja rentabilidad que han afectado no solo a los modelos nuevos, sino a todo el negocio.
Como resultado, la empresa tuvo que revisar urgentemente sus planes, cancelar algunos desarrollos y entrar en modo de gestión de crisis. Y esto no es teoría: los reportes financieros ya muestran que el "experimento eléctrico" está saliendo muy caro.
Por qué los deportivos eléctricos no mantienen el valor
Hay varias razones, todas bastante terrenales:
- Autonomía limitada en los eléctricos de alta potencia;
- Tiempos de carga largos comparados con repostar gasolina;
- Obsolescencia rápida de la tecnología de baterías;
- Poca demanda de estos autos en el mercado de seminuevos.
Todo esto forma una ecuación incómoda: la oferta supera con creces la demanda, y los precios caen en picada. Rápido y sin piedad.

Taycan Turbo GT Weissach: récord sí, demanda no
Un ejemplo claro es el Porsche Taycan Turbo GT Weissach. Es la cumbre de la ingeniería: hasta 1,108 caballos de fuerza, aceleración de 0 a 100 km/h en alrededor de 2 segundos y el título del Porsche con mayor aceleración en toda la historia de la marca. Además, récord en Nürburgring, aunque no sea la noticia más alegre para los fans de los motores de combustión.
Un ejemplar específico del año modelo 2025 con solo 227 km apareció en subasta en Bring a Trailer. Nuevo, el auto costó alrededor de 5,300,000 pesos mexicanos con opciones incluidas (orientativa para México, dependiendo de configuración). Para referencia: color, rines y acabados agregaron poco en este segmento.
Y aquí viene lo interesante.
Menos cientos de miles de pesos en pocos meses
La puja máxima en la subasta llegó solo a equivalente de unos 3,500,000 pesos mexicanos. Aunque la reserva no se alcanzó, la diferencia es impactante. Formalmente, una pérdida de más de 1,500,000 pesos prácticamente de la nada, con kilometraje mínimo y un auto casi nuevo.
Y esto no es una excepción, sino más bien la norma. Perder 1 a 2 millones de pesos en el primer año para los Taycan premium es hoy una historia común. Y después, las cifras se ponen aún peor.

Qué significa esto en la práctica
Los compradores de Porsche raros y caros están acostumbrados a otro escenario. Un 911 GT3 RS suele mantener su valor por años, o incluso subir. Con la versión eléctrica, esa fórmula no funciona. Y la gente que cuida su dinero —que es la mayoría de los clientes Porsche— lo ve perfectamente.
Al final, el mercado pone todo en su lugar. Se puede hablar todo lo que se quiera del futuro, la ecología y los récords, pero si un auto pierde cientos de miles de pesos en meses, el entusiasmo se evapora rápido.
La historia del Taycan Turbo GT Weissach no es solo una reventa fallida. Es una señal clara de que el formato eléctrico en el segmento de deportivos premium aún no se ha convertido en ese "nuevo oro" que muchos esperaban.